Uno no para de sorprenderse cuando escucha a ciertos portavoces de la derecha y la ultraderecha hacer, sin que se les caiga la cara de da vergüenza, ciertas aseveraciones fuera de lugar y que nunca deberían ser dichas por ellos, por las siguientes razones.

Tanto Pablo Casado y su entorno, incluyendo a la Presidenta de la Comunidad de Madrid, no se distingue por su excelente formación; todo lo contrario, se trata de gente que se destaca por su falta de educación, propia de una envidia devenida de un conocimiento falso de la realidad que, a su vez, le provoca un complejo de inferioridad que salta a la vista.

¿Cómo es posible que Santiago Abascal y Pablo Casado vayan insultando todos los miércoles, en las sesiones de control, al presidente del gobierno? Pero lo peor es que esto mismo lo hacen en todos los ambientes. Así, lo último que le he escuchado a Pablo Casado es referirse a Alberto Garzón como “alma de cántaro”, siendo éste un economista de gran formación, que ha escrito varios libros. Este comportamiento, lejos de amedrentar a su interpelado, pone de manifiesto la persona que es y que no puede sacar su CV porque es tan falso como la “la falsa monea”.

También, el otro día, Mónica García, la Portavoz de Más Madrid en la Asamblea de la Capital del Reino, le tuvo que decir a su Presidenta que, por favor, la mirara a la cara cuando la hablara. Para el que suscribe, queda a la vista que la Presidenta, frente a Mónica García, exhibe un complejo de mucho cuidado. ¿Por qué?, porque Ayuso es conocedora de que su opositora tiene un nivel intelectual y personal mucho más alta que ella, lo cual es algo que no puede soportar. ¡Solo faltaría que Mónica le ganara la presidencia de la Comunidad de Madrid! ¡Sería insoportable para Ayuso!

Pero a todo esto, la derecha no hace oposición, se limita a insultar y decir obviedades o mentiras. ¿Quién hace la oposición al gobierno? La Justicia, desde el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ-TS), y el Tribunal Constitucional (TC), porque ahí están, mayoritariamente, los esbirros del PP y de VOX, aunque se estén pasando tres años, ¡TRES!, de su mandato. Y luego van y le dicen a Pedro Sánchez “ocupa” de la Moncloa. Los verdaderos ocupas son los jueces de los altos tribunales que, si tuvieran vergüenza, hace tiempo que habrían dimitido para bien de este país. Es más, la presencia de jueces/juezas que han estado largos años al servicio del PP como cargos de confianza, investigando a José Felix Tezanos, el Presidente del CIS, es algo que produce vergüenza. Cuando la fiscalía no ha visto ni rastro de algo que pueda ser delictivo.

Una derecha que ha votado en contra de todas las propuestas del gobierno en ertes, ayudas a los empresarios y autónomos, aumento del SMI, y ahora ya ha manifestado su oposición a una Ley de la Vivienda, que debe servir para que no suba precios de compra y alquiler. Pero lo mejor es que su posición la han manifestado antes de leerla. ¡Les da igual!

Resumiendo: con una derecha que, al revés que ocurre en casi todos los países de Europa, cada vez se alinea más con los herederos del franquismo, y con una Justicia, en manos del PP y VOX, este país, al menos de momento, hasta que las cosas cambien, no tiene solución.